81 PAMUÇAK PLAJI A 22-23 DE JULIO DE 2024

 

 Hoy la fuente que hemos encontrado era un poco complicada y ya nos encontramos este modelo en Rusia. La gente va a los gimnasios a hacer músculo pues que vengan aquí que lo van a tener gratis y a la sombra.

Hemos salido del lugar en dirección a Marmaris como habíamos quedado con Onur, pero a medio camino nos ha escrito para decirnos que estaba en casa de sus padres y que iríamos directamente allí. Nos ha extrañado mucho ya que los padres de Onur vivían cerca del mar negro y los conocimos en el primer viaje y ya eran mayores. Hemos pensado que habían comprado alguna casa en Hisaronu que es donde Onur nos ha dicho que estaban. Al llegar al lugar no entendíamos nada ya que es el sitio donde Kadri tenía la granja de vacas cuando tenían el camping. Hemos llegado al sitio y Onur nos ha visto de lejos y ha comenzado a hacernos señas para indicarnos por donde tenían la entrada. Hemos dejado la furgoneta y lo primero ha sido un abrazo con Onur casi se le caían las lágrimas. Le ha dado también un abrazo a Mertxe y me ha señalado una persona que estaba en el porche de la casa, pero como nos daba el sol de frente no sabía quién era. Al acercarnos nos ha dicho Onur que era Kadri. Bueno igual les han invitado a Kadri y a Hava a comer. Enseguida hemos entendido todo, Onur les llama padres a sus suegros ósea Kadri y Hava y la casa nueva es de Kadri y Hava. 


Le he explicado a Onur lo que pasaba y se moría de risa. Me ha explicado que un día Kadri le propuso que le llamase papá y hasta hoy.  Nos hemos dado un abrazo con Kadri y Hava los 4 juntos. Kadri dentro de su seriedad ha mandado callar y le ha dicho a Onur que pusiese en marcha el “traslator” que nos quería decir unas palabras. Es muy serio pero muy buena gente. Ha tomado la palabra y nos ha agradecido que hayamos ido a visitarles porque se acuerdan mucho de nosotros y los buenos momentos que pasamos juntos. Casi se le caía la “lagrimica” así que ha sido Hava la que también nos ha agradecido la visita y hemos pasado a ver la casa. Ellos vivían en una casa dentro del camping, pero al venderlo se fueron a Marmaris de alquiler mientras hacían la casa. Hemos estado un buen rato recordando anécdotas de aquellos meses. Kadri dice que nunca olvidará nuestra cara cuando llegamos al camping en el coche de la policía militar. Hemos hecho muchas risas y enseguida a dicho Hava que tenía pasta con almendras y queso para comer.

No he comentado nada sobre Eze y Çinar. Son los hijos de Onur y Özgün. Çinar era el que siempre nos acompañaba en los paseos por dentro del camping durante la pandemia, Eze todavía no había nacido. Ha crecido un montón y se le ve muy espabilada y hablando muy claro. Eze no nos quería ni mirar, pero luego poco a poco a comenzado a mirarnos y sonreír. Es muy pequeña y nos miraba con cara de sorpresa sin entender nada. Hemos comido muy bien y nos ha sorprendido porque nos ha sacado un tzaltziki que es agua de yogurt con pepino y queso. Estaba buenísimo y eso que ha Mertxe no le hace mucha gracia el pepino, pero se lo ha tomado todo.  Estaba muy fresco. Decir que Hava cocina espectacular y siempre nos sorprende y nos sorprendía con cosas que nos preguntaba si habíamos probado.

Nos han preguntado por el viaje y por las intenciones que tenemos. Hava está un poco enfadada con Kadri ya que dice que a ella le gusta mucho viajar y a Kadri también pero sólo le gusta en el barco que tienen. A ella le gusta como a nosotros en autocaravana que también tienen, pero a Kadri no le gusta conducir así que nos ha dicho Hava que se viene con nosotros.

Hemos dado por concluido el encuentro ya que ha llamado Çosku desde Selimiye para decirnos que nos estaban esperando élla, Volkan y Ege. Con mucha pena nos hemos despedido con la promesa de Onur de viajar a Vitoria. Le hemos dicho que cuando quieran que estamos allí y que pueden ir sin problemas. Ozgun está metida en el CPH y tiene unos horarios que me recuerdan a los de Pili en sus épocas. Onur se ha enfadado con ella porque ha llamado que va a tardar un rato más. Le he dicho a Onur que no se enfadase que ya conocía esa historia y que así tiene la obligación de ir a Vitoria.

Nos hemos despedido con mucha pena, pero no queda más remedio. Ellos trabajan y no pueden estar pendientes de nosotros ni nosotros queremos entorpecer su vida.

Hemos salido en dirección a Selimiye donde está como dice Kadri la otra parte de nuestra “familia Turka”. Conocíamos Selimiye del primer viaje y sabíamos de sus calles estrechas y de dos direcciones que con éstos ya de normal es complicado así que con esta estrechez ya es la “leche”. Hemos llegado a los Hoteles y hemos preguntado por Volkan y Çosku. Enseguida ha salido Volkan que nos ha dicho que estaba reunido con un cliente y que subiríamos a Leo Hotel que allí estaba Çosku. Nos han subido en un triciclo eléctrico hasta el hotel y en la entrada ya estaba Çosku esperándonos. Está igual que siempre y con esa sonrisa de oreja a oreja. Nos hemos dado un gran abrazo y hemos subido a un pequeño bar que tienen en el primer piso con una terraza enorme y unas vistas increíbles. Hemos tomado un té y como siempre las “señoras” una cerveza. Nos ha contado que trabajan mucho pero que están pensando si merece la pena tanto trabajo ya que el calor que hace aquí es asfixiante y nunca sopla un poco de aire. La verdad es que la veo muy triste y cansada. Enseguida ha llegado Volkan y hemos comenzado a hablar de todo un poco, pero es casi imposible porque los teléfonos de ellos no paran de sonar y Volkan a tenido que bajar al EGE motel porque había algún problema. Hemos estado casi 2 horas y hemos visto que el “trajín” de gente y el trabajo que eso supone es muy elevado. Parece que Ege les está dando más problemas que los típicos de la adolescencia. Después de hablar de todo un poco nos hemos despedido de Çosku que se le han caído las lágrimas y hemos bajado andando para despedirnos de Volkan.

Esta es una "parte de nuestra familia en Turkia". En las fotos faltan Ozgün, Volkan y Ege. 

Hemos salido de Selimiye no sin antes tener que discutir porque uno quería que pasásemos y no se daba cuenta que era mejor que pasasen los que venían de frente y así luego había más sitio, pero son unos impacientes y no saben esperar.

Ya en la carretera hemos reconocido un sitio donde una vez paramos para darnos un baño lo que pasa es que hay que bajar bastante por un camino muy empinado. Pero esta vez estaba la puerta abierta y hemos visto que había caravanas y alguna furgo así que bajamos y cuando estábamos aparcando ha venido un turko a decirnos que en primera fila se marchaba uno y que aparcaríamos allí.  



No hay arena y todo son rocas para entrar en el agua, pero alguien ha hecho unas escaleras y entras sin problema y luego es de arena muy fina. Hemos aparcado y enseguida nos hemos puesto el traje de baño y nos hemos bañado. Qué gozada, hemos estado un buen rato en el agua ya que estábamos asfixiados del calor que hacía y si a eso añades Selimiye y su “no” viento pues ya tienes bastante. Cuando sales del agua no te impregnas de arena y llegas a la Jomer “limpito”.

Hoy dormiremos aquí y ya veremos si nos quedamos o seguimos camino ya que toda la zona de Marmaris es zona “comanche” para nosotros ya que no permiten aparcar si no vas a un camping. Como en la península los hosteleros “mandan” mucho o reparten mucha “pasta” en distintos bolsillos. Hemos hecho una parada en Marmaris para recoger sulfato de cobre para el baño. Es un conocido de Onur al que ya le hemos comprado en otras ocasiones. Me ha saludado y nos ha dicho que se imaginaba que era para nosotros como otros años. Hemos charlado un rato y enseguida nos hemos ido ya que la Jomer está mal aparcada y a él se le estaba llenando la tienda. Daros cuenta de la situación que están viviendo en Turkía con la inflación, el año pasado compramos el sulfato a 100 liras el kilo éste años está a 200, el doble. Según a dicho Kadri es imposible seguir así y en poco tiempo tiene que explotar por algún lado.

Al final nos hemos ido dirección a la playa que conocemos cerca de Efesos. El recorrido es muy pesado ya que es un constante sube y baja.  



Hemos llegado sobre las 14h y pensábamos que iba a haber mucha gente, pero hay mucho sitio y muy poca gente. 



Nunca entenderemos lo de este país, en los sitios más grandes no hay nadie y en los más pequeños se apelotonan como “txintxes”.

Esperamos estar tranquilos y dormir bien. No sabemos cuantos días estaremos, pero por lo pronto un par de días seguro sino más.



Por cierto la gente se sigue casando, cuando llegamos al pantalán había 3 parejas sacándose fotos.

Buenos mañana será otro día, ondo lo egin.

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