ARCHILI, TIANETI, ANANURI  A 20 DE ABRIL DE 2024

 

Hemos juntado 3 días ya que en Ananuri llevamos desde el jueves día 18. No queremos subir hacia el norte ya que esta carretera a la cual denominan Carretera Militar Georgiana es un paso único en el camino hacia la frontera con Rusia. Cientos de camiones desde Mheskheta inundan dicha carretera en dirección a Rusia. Es el único paso abierto y los pequeños pueblos que hay en su recorrido “viven” de ella. No hay mucho para ver ni sitios donde dormir así que hemos decidido que aquí en Ananuri es donde mejor estamos hasta subir directamente a la frontera. Allí y unos cientos de metros antes pasaremos la noche del 24 al 25 para a priemra hora de la madrugada pasar a Rusia y que nos dé tiempo para cruzar los 700km que tenemos desde Vladikazkaz hasta Asthrakan.

Salimos del Monasterio de Archili y por una carretera que atraviesa la montaña pasamos al otro lado en pocos kilómetros. La carretera tiene unos “socavones” importantes y es mejor tomarlo con calma que reventar alguna rueda.

Hemos parado en Tianeti para comprar algo que nos hacia falta. Al pasar hacia la tienda hemos visto una Iglesia muy bonita. Hemos hecho la compra y encontrado pan que no es nada fácil pero fruta y verdura no tienen nada. 

Hemos dejado todo en la Jomer y hemos ido a ver la Iglesia. Había una señora en la entrada al lado del campanario que nos ha saludado al entrar.

Como todas las iglesias las pinturas están un poco estropeadas. Hemos dado un paseo alrededor de ella viendo tumbas de gente importante que vivía aquí. Está rodeada de una muralla y tiene dos entradas. Dentro está la Iglesia, el campanario de una torre y la casa donde nos imaginámos que viven los que cuidan el sitio.

Hemos seguido camino a después de unos 35km teníamos marcada una Catedral de Bodavi de la Madre de Dios. Se reconstruyó en el 2014 ya que la cúpula se había caído por culpa de un terremoto en el año 1989. Había un Monje sentado en las escaleras de la vivienda que justo a levantado la cabeza al pasar y nos ha hecho un gesto a modo de saludo pero no mucho más.

Hemos entrado y se nota que está recién rehabilitada. Las pinturas están resplandecientes y todo se ve como muy nuevo. Hemos recogido la Jomer y hemos puesto dirección a Ananur.

Es un sitio de muy buenos recuerdos para nosotros ya que ahí conocimos a Denis y Helena y a sus hijos Milena y Mirón. Además también coincidimos con una pareja de holandeses con los cuales mantenemos el contacto, Rommert y Hanneke. Por cierto su idioma es el Frisón.

Aquí nos quedaremos hasta el domingo-lunes que empezaremos a subir hacia la frontera.

Ayer viernes no madrugamos pero tampoco pudimos estar más tiempo en la cama ya que el día amaneció despejado y el sol “cascaba” bien.

Desayunamos y subimos a ver el Monasterio de Ananuri sin pensar que los viernes es el día que esta gente más se mueve y además alucinamos con la cantidad de autobuses que habían llegado para las 11h de la mañana.

Todo estaba a rebosar así que dimos una vuelta al Monasterio y lo pudimos ver por dentro cosa que el año pasado no pudimos hacer porque estaba cerrado por obras. Filas y filas de gente que querían ver el Monasterio y dentro era prácticamente imposible sacar una foto sin gente.

 El año pasado dimos la vuelta al Monasterio por un camino que recorre la muralla a media altura pero hemos visto que lo han cerrado. Hemos salido y hemos ido hacia el otro lado del lago. Un camino por donde se ve que andan los coches pero hemos sido incapaces de saber por donde acceden. 

La entrada principal está cerrada con candado y además dos grandes “mazacotes” de cemento impiden la entrada. El caso en que dos kilómetros hacia el agua hay un todoterreno. Queríamos llegar hasta el agua pero no hemos podido ya que el camino se corta.

 Hemos dado la media vuelta y vuelto hacia “casita”. Se ha levantado viento y como todo es tierra se forman unas nubes al paso de los coches que impiden ver nada más adelante.

Hemos comido y la tarde la hemos pasado haciendo “nada” cosa poco habitual en nosotros que somos unos “culos inquietos”.

Hoy sábado después de desayunar hemos buscado un sitio para comprar el pan y si había verdura o fruta. El pan sí pero verdura y fruta nada, nos hemos tenido que conformar con unos plátanos que durarán poco porque están muy maduros. Hemos dado un largo paseo hacia el otro lado del lago pero tiene peor “pinta” que el de ayer. Las casas están todas como si las fuesen a demoler pero hemos visto que en la mayoría hay gente viviendo.